El turismo y las comunidades en Guatemala: Breve historia y análisis

Lic. Pablo Estuardo Alarcón [1]


Introducción

En la actualidad, el turismo representa para Guatemala el segundo generador de divisas, por detrás de las remesas familiares (BANGUAT, 2009).  Su crecimiento ha sido constante y sostenido a lo largo de las últimas dos décadas.  Guatemala ha representado un destino accesible a los principales centros emisores mundiales de turismo conformados por Estados Unidos, Canadá y el Centro de Europa.  Su rica biodiversidad, en conjunto con sus rasgos culturales, la han posicionado como un destino de gran atractivo para los consumidores.  Debido a esta riqueza, ha sido necesario establecer parámetros para el aprovechamiento turístico de los destinos, de una manera eficiente y sostenible.  Como resultado de esto, surgen modalidades de turismo responsable con los recursos y atractivos a visitar. 

Últimamente, existe una diversificación en cuanto a la oferta de productos y servicios turísticos, surgiendo modalidades tales como el turismo de aventura, el ecoturismo o el turismo cultural.  Este último ha cobrado mayor notoriedad, debido a la cobertura mediática que recibe y a su aparición en las agendas de desarrollo por parte de diferentes entes relacionados al tema turístico y/o al tema social. Sin embargo, aparte de la familiaridad que pueda tener el término actualmente, existen varios interrogantes con respecto al mismo, tales como: ¿es un fenómeno nuevo? ¿Cuáles son sus orígenes? ¿Cómo encajan las empresas tradicionales en este tipo de turismo? ¿Las comunidades pueden lucrar con actividades turísticas?  El abordaje a estas preguntas requiere hacer un análisis histórico de la dinámica entre el turismo y las comunidades en Guatemala. Implica también conocer a los diferentes actores que han influido en las políticas nacionales, y establecer el papel que pueden tener las comunidades en el sector turismo.

El turismo y su dinámica

El sector turismo está conformado, como todas las actividades económicas, por los factores de oferta y demanda.  Para hacer una caracterización de ambas en el sector, establecemos la definición de “turismo” propuesta por la Organización Mundial de Turismo (OMT, 1994), la cual establece que:

“el turismo comprende las actividades que realizan las personas durante sus viajes y estancias en lugares distintos a su entorno habitual, por un periodo de tiempo consecutivo inferior a un año y mínimo de 24 horas, con fines de ocio, por negocios y otros”

Tomando en cuenta esta definición, la demanda está conformada por todas aquellas personas que se desplazan a lugares distintos a su entorno, y por lo menos pernoctan una noche, sin establecerse más de un año; y cuyos fines son el ocio, los negocios y otros.  A todos aquellos que se desplazan, pero visitan un lugar menos de 24 horas son llamados “excursionistas”.
En cuanto a la oferta, la OMT la define como “el conjunto de productos turísticos y servicios puestos a disposición del usuario turístico en un destino determinado, para su disfrute y consumo”.
Considerando las definiciones de demanda y oferta en el sector del turismo, la primera está conformada por turistas con necesidades centradas principalmente en la alimentación, hospedaje, transporte y logística, con otros agregados según la modalidad de turismo que practiquen (entretenimiento y ocio, facilidades para hacer negocios, etc).   Siendo así, los oferentes son todos aquellos que satisfacen estos requerimientos, además de servicios y productos conexos a estas actividades (tales como la infraestructura vial, los servicios de salud, seguridad ciudadana, y los servicios financieros, entre otros).

El sector del turismo ha tenido su dinámica principalmente en el sector público que la regula y la promueve (representado principalmente por el Instituto Guatemalteco de Turismo –INGUAT-, y en algunos casos por algunas municipalidades), el sector privado empresarial que desarrolla las actividades económicas (representado por gremiales tales como la Cámara de Turismo –CAMTUR-) y las entidades no gubernamentales (ONGs y agencias de cooperación internacional) que han identificado al turismo como alternativa para el desarrollo económico local.  Además estos tres sectores bien definidos, se puede incluir un cuarto sector, conformado por las comunidades locales, quienes en la primera década del siglo XXI han consolidado su participación en el turismo como sector formal organizado.

Perfil histórico del turismo y las comunidades en Guatemala

Desde los primeros esfuerzos para la finalización del conflicto armado interno en la década de 1980, con los acuerdos de Esquipulas y el primer gobierno electo democráticamente después de varias décadas en el año 1986, Guatemala sentó bases que favorecieron su imagen externa.  Esto contribuyó a una explosión en el aumento del arribo de turistas; provenientes principalmente de Norteamérica y Europa.  La tendencia incentivó el sector turístico, generando conciencia hacia esta actividad como una alternativa viable en el desarrollo económico del país. 

Paralelamente a los esfuerzos democráticos, en el gobierno del presidente Vinicio Cerezo Arévalo, en 1986 se conforma la Comisión Nacional de Medio Ambiente -CONAMA-, a partir de la declaración de la primera Ley Ambiental.  Esto propicia más tarde la creación de la Ley de Áreas Protegidas (año 1989), y del ente que las regula: el Consejo Nacional de Áreas Protegidas -CONAP-.  A raíz de estos acontecimientos, Guatemala establece mecanismos para la protección y manejo de los recursos naturales en áreas protegidas, principalmente en la denominada “Reserva de Biósfera Maya” situada en el norte del departamento de Petén (Pilón, 2007).  Estos acontecimientos sentaron bases en cuanto al uso de los recursos naturales como recursos susceptibles de uso turístico.

En el año 1991, como producto de los acuerdos de paz, la ACNUR (agencia de la ONU para los refugiados), a través del gobierno guatemalteco, conforma la Comisión Nacional para la Atención de Repatriados, Refugiados y Desplazados (CEAR) que promovió el retorno de comunidades desplazadas por la guerra interna desde México hacia Guatemala (ACNUR, 1991). Como resultado de estas acciones y de las legislaciones existentes en materia de recursos naturales, se establecen planes para la concesión de extensiones forestales a grupos comunitarios para su conservación y uso, contemplando el ecoturismo dentro de estos planes (Rodas, 2001).

En el transcurso de la década de 1990, se contempla la actividad turística dentro de las negociaciones de Paz, particularmente en el “Acuerdo Sobre el Cronograma para la Implementación y Verificación de los Acuerdos de Paz” (suscrito en 1996),  donde se establece en los artículos 168 (Concesiones de Manejo de Recursos Naturales) y 170 (Programa de Manejo de Recursos Naturales Renovables), líneas de acción que contemplan la modalidad de ecoturismo para el desarrollo y manejo sostenible de los recursos naturales renovables tal y como se puede apreciar en las siguientes citas textuales:

“…Concesiones de manejo de recursos naturales
168. Para 1999, haber otorgado a pequeños y medianos campesinos legalmente organizados, en concesiones de manejo de recursos naturales, 100,000 hectáreas dentro de áreas de uso múltiple para fines de manejo forestal sostenible, administración de áreas protegidas, ecoturismo, protección de fuentes de agua y otras actividades compatibles con el uso potencial sostenible de los recursos naturales de dichas áreas…”

“…Programa de manejo de recursos naturales renovables
170. Impulsar un programa de manejo de recursos naturales renovables que incentive la producción forestal y agroforestal sostenible, así como proyectos de artesanía, ecoturismo, y pequeña y mediana industria que den valor agregado a productos del bosque…”  
(Gobierno de Guatemala – URNG – ONU, 1996)

Estos enunciados se concretan parcialmente con las concesiones forestales en el departamento de Petén, donde se otorgaron extensiones dentro de la Reserva de Biósfera Maya a grupos comunitarios organizados dentro de la figura de Cooperativas de Comercialización de productos y servicios.  Sin embargo, aunque siempre se ha mencionado al turismo como parte de las funciones a desarrollarse en estas cooperativas, sus actividades se han centrado principalmente en la transformación y comercialización de productos forestales, en especial los maderables, debido a la rentabilidad que estos productos representan para los asociados.  No obstante lo anterior, las diferentes comunidades forestales del departamento del Petén se encuentran agremiadas en la “Asociación de Comunidades Forestales de Petén” (ACOFOP), la cual tiene dentro del índice de sus proyectos al denominado “Proyecto de Fomento del Manejo Integral de los Recursos Naturales y Culturales de la Reserva de la Biosfera Maya, mediante la participación comunitaria en el Turismo Sostenible.”

Después de la firma de la paz en el año 1996, diversas entidades de cooperación internacional para el desarrollo ofrecieron programas destinados al desarrollo rural en diferentes temas y áreas geográficas.  Las regiones que más atención recibieron fueron aquellas donde el conflicto armado tuvo mayores repercusiones y víctimas.  Así, hubo gran flujo de recursos técnicos y financieros destinados a proyectos de mejoramiento de vida, donde se contempló el aspecto de productividad como alternativa de desarrollo.  Dentro de este enfoque, fue común encontrar en los planes operativos, propuestas relacionadas a iniciativas turísticas, principalmente de hospedaje y alimentación para visitantes extranjeros (Rodas, 2001).

Conjuntamente con los proyectos de cooperación internacional de colaboración directa con el gobierno guatemalteco, surge también desde finales de la década de 1980 gran cantidad de ONGs, financiadas en gran parte por fondos provenientes de países desarrollados con la intención de realizar proyectos encaminados al desarrollo.  En estos casos, el turismo también es considerado dentro de varias iniciativas, como el caso de la Fundación Defensores de la Naturaleza en los planes de conservación de la Reserva de Biósfera de Sierra de las Minas y la Reserva de Vida Silvestre Bocas del Polochic en el período 1995-2000; o la Fundación ProPetén con una iniciativa de giras ecológicas con base comunitaria en los años 1998-2003.
Dentro el ámbito de la microempresa, el Ministerio de Economía, con la cooperación de la Comunidad Económica Europea establecieron el Programa de Apoyo al Sector Informal en Guatemala (PROSIGUA), el cual existió en el lapso de los años 1995 a 1998.  Dentro de sus funciones, contemplaron la asistencia a la microempresa, dándole un énfasis marcado al desarrollo turístico.  Como resultado de esto, se logró hacer una caracterización de la microempresa turística en Guatemala (Piedra, 1999), y el apoyo al desarrollo de un proyecto de hospedaje en casas familiares en los municipios de Nebaj, Chajul y Cotzal en departamento de Quiché (Alarcón, 2000). 

Las políticas turísticas oficiales y la agremiación del sector

Guatemala se ha considerado desde varias décadas atrás como un destino turístico enfocado en sus riquezas culturales, principalmente en lo que respecta a cultura viva representada en las veintidós etnias indígenas que la conforman.  Las manifestaciones culturales relacionadas a indumentaria, forma de vida, color local y condiciones de vida tradicionales, en conjunto con sitios arqueológicos prehispánicos y coloniales han representado la carta de presentación de la nación a través de las décadas de 1970, 1980 y 1990.  En la década de 1990, el INGUAT estableció una categorización de varios “sistemas-producto” que segmentan el país en varias regiones, con la finalidad de comercializar diferentes servicios y productos en función de los recursos que se distribuyen geográficamente en la nación.  Los sistemas definidos fueron:

1.  Guatemala Moderna y Colonial: situada en los departamentos de Guatemala y Sacatepéquez, centrada en las ciudades de Guatemala y Antigua Guatemala.

2.  Altiplano Indígena Vivo: abarcando la región conocida como el “altiplano” que abarca los departamentos de Chimaltenango, Sololá, Totonicapán, Quetzaltenango, Quiché, Huehuetenango y parte de San Marcos.  En esta región se centran los destinos tradicionales de Panajachel y Chichicastenango; además de las manifestaciones culturales indígenas vivas ya mencionadas.

3.  Aventura en el Mundo Maya: Sistema que abarca el departamento de Petén.  Abarca variedad de sitios arqueológicos mayas prehispánicos, dentro de los cuales se incluye la ciudad de Tikal, uno de los principales destinos turísticos guatemaltecos.

4.  Un Caribe Diferente: Tiene su cobertura en la Costa Atlántica en el departamento de Izabal.  Se centra en los recursos naturales selváticos del departamento y las manifestaciones culturales garífunas ante la inexistencia de playas de arena blanca y mar azul que predominan en otros destinos del mar Caribe tales como Belice, Honduras y las islas caribeñas.

5.  Paraíso Natural:  Centra su territorio en los departamentos de Alta y Baja Verapaz, haciendo énfasis en los recursos naturales, principalmente en las regiones montañosas de las sierras de las Minas, Chuacús y Chamá, donde predomina el denominado “bosque nuboso”, dentro del cual se ubica el Biotopo para la Conservación del Quetzal Mario Dary Rivera.

6.  Guatemala por Descubrir:  Este sistema ha sido denominado a partir del año 2008 como “Oriente, Místico y Natural” y abarca la región que popularmente se denomina “Oriente”, que abarca los departamentos de El Progreso, Zacapa, Chiquimula, Jalapa, parte de Santa Rosa y parte de Jutiapa.  Es la región con menos desarrollo turístico hacia visitantes internacionales, con la excepción de Esquipulas en el departamento de Chiquimula, sitio turístico importante para turismo religioso a nivel regional en los países centroamericanos y México.

7.  Costa Pacífico: Este sistema ha sido denominado a partir del año 2008 como “El Pacífico, Exótico y Diverso”.  Contempla toda la franja de la costa del Océano Pacífico en los departamentos de San Marcos, Retalhuleu, Suchitepéquez, Escuintla, parte de Santa Rosa y parte de Jutiapa.

Los sistemas-producto se han establecido desde entonces como estrategia de mercadeo para la promoción de Guatemala en los principales mercados internacionales, primordialmente Estados Unidos, Canadá y Europa Central.

En el año 2000, el INGUAT estableció la “Estrategia Nacional de Turismo” dentro de la cual, se propuso la descentralización de la labor turística del sector público y la coordinación entre los diferentes actores del cluster turístico.  Como resultado de esta línea de acción se estableció la creación de “Comités Locales de Turismo”, los cuales tenían por objetivo ser instancias de participación de los sectores clave en el ámbito local para efectos de formular y ejecutar, con amplia participación y consenso planes de desarrollo de su localidad (Gobierno de Guatemala, 2000).  Además, en esta estrategia, se impulsa un programa de seguridad turística, la cual establecerá más tarde el programa de Asistencia al Turista (ASISTUR) coordinado por INGUAT hasta la actualidad.

En el año 2003, la CAMTUR en conjunto con el INGUAT, definen la “Política Nacional para el Desarrollo Turístico de Guatemala 2004-2014”, la cual amplía las líneas de acción contenidas en la estrategia anterior, en los siguiente apartados: Estructura institucional, consolidación y desarrollo de destinos turísticos, integración turística regional, sistema de información turística, cultura y formación turística, mercadeo y programa de seguridad.  Dentro de esta nueva política, los Comités Locales de Turismo se transforman en “Comités de Autogestión Turística” (CAT), en los cuales se establece el empoderamiento local como clave para el desarrollo, donde colaboran las autoridades locales, los consejos de desarrollo urbano y rural, representantes de empresarios locales relacionados con el turismo, grupos organizados de la comunidad, representantes de organizaciones no gubernamentales y representantes de la cooperación internacional.  También se establece el papel de INGUAT en estos comités como facilitador y asesor en labores de desarrollo y mercadeo turístico, para que éstos obtengan autonomía en la gestión de su propio desarrollo.  Para la adecuada ejecución de esta línea de acción, se estableció la necesidad de conformar a los CATs de personería jurídica bajo la figura de asociaciones civiles, lo cual les faculta a poseer un patrimonio y la gestión y administración de recursos monetarios para el cumplimiento de sus objetivos.

A partir de este momento, las comunidades interesadas en desarrollar iniciativas relacionadas al turismo han tenido diversas dinámicas con respecto a los Comités de Autogestión Turística que les competen geográficamente.

En 1999 el gobierno de Guatemala declara por medio del acuerdo gubernativo 942-99, el Programa Nacional de Competitividad, el cual define, impulsa y apoya acciones concernientes a la inversión productiva en el país y su competitividad.  En el caso específico del turismo, ha promovido la creación de las “Agendas Compartidas de Competitividad Turística” (ACCT) en seis departamentos,  las cuales identifican las estrategias y acciones de proyectos a ejecutarse en 2009, 2010 y 2011, con el fin de aumentar el número de turistas, el gasto diario que realizan, el tiempo de estadía y la ocupación hotelera.  En acciones puntuales, estas agendas han identificado el trabajo conjunto entre empresas privadas y proyectos de naturaleza comunitaria.

Después del cambio de milenio, Guatemala poseía ya varias instancias públicas, privadas y de cooperación, interactuando en diferentes localidades en la mayor parte del país.  En el año 2004, la Organización Internacional de Trabajo (OIT) convoca en la ciudad de Guatemala, el primer Encuentro Consultivo de Turismo Comunitario, realizado en el mes septiembre.  Como resultado de este encuentro, se establecen criterios para propiciar esta modalidad de turismo de una manera oficial, involucrando a comunidades rurales, universidades, sector privado y ONGs.  Al año siguiente, se conforma la Federación Nacional de Turismo Comunitario (FENATUCGUA), integrada por diferentes proyectos turísticos comunitarios, bajo la ayuda y colaboración de CAMTUR, el INGUAT y la OIT.  A partir de este momento, se adopta la definición de “Turismo Comunitario” establecida por la Red de Turismo Comunitario de América Latina (REDTURS) auspiciado por OIT; la cual lo precisa como “el conjunto de emprendimientos de propiedad y autogestión comunitaria que operan bajo los principios de ser socialmente solidarios, ambientalmente responsables, culturalmente enriquecedores y económicamente viables.” (REDTURS-OIT, 2003).

Por su parte, la CAMTUR creó una propuesta que fue aprobada y financiada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con colaboración del INGUAT. Esta propuesta contemplaba la caracterización de proyectos relacionados a turismo comunitario en el altiplano central, occidental y las Verapaces. Además, se hicieron tres propuestas para rutas temáticas, capacitación y asistencia a proyectos; y propuesta de mecanismos de promoción.  El proyecto fue nombrado B’yanik, y tuvo operaciones en el lapso de los años 2006-2008.

Paralelamente, desde el año 2001, la institución Counterpart International, con el apoyo de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), la Universidad de Vanderbirt (localizada Nashville, Tenesee, EEUU), la Universidad del Valle de Guatemala (UVG), el Instituto Técnico de Capacitación y Productividad (INTECAP) y el Ministerio de Cultura y Deportes, apoyaron iniciativas relacionadas a turismo sostenible en la región norte del departamento de Alta Verapaz con el proyecto denominado “Puerta al Mundo Maya”. Esta iniciativa se centró en el empoderamiento de comunidades rurales pertenecientes a la etnia Q´eqchí, en la prestación de servicios turísticos, administrados por las poblaciones locales.

Además, Counterpart International también lideró el consorcio público – privado denominado “Alianza para el Turismo Comunitario”, conformado por diferentes entes relacionados a turismo y comunidades.  Esta alianza se inició en el año 2006, terminando a finales de 2009.  Sus objetivos fueron el apoyo a empresas turísticas comunitarias, mejores accesos a mercadeo, el mejoramiento de  las capacidades de las comunidades, y el aumento del apoyo para la conservación de la diversidad biológica alrededor de los sitios del proyecto.

Las comunidades como proveedores turísticos

Las comunidades en Guatemala poseen un rango extenso de características según su nivel de organización, cultura, idioma, historia y localización geográfica.  Sin embargo, se puede clasificar la relación de una comunidad con el turismo según las siguientes categorías:

1.  Comunidades como destinos turísticos.  Ciertas localidades tienen como mayor recurso el patrimonio cultural vivo.  En este caso, los habitantes y comunidades receptoras son en sí el atractivo del destino.  En esta categoría se encuentra la población de Chichicastenango en el departamento de Quiché y el poblado de San Juan Chamula en Chiapas, México.   Los turistas son atraídos por las manifestaciones culturales de los habitantes, tales como la indumentaria y las costumbres cotidianas propias de sus etnias.  En estos casos, las comunidades no necesariamente son proveedores de servicios por voluntad propia.

2.  Comunidades como proveedores de productos o servicios directos al consumidor final.  Los casos más documentados sobre turismo comunitario se concentran en esta categoría.  Generalmente las comunidades aprovechan un flujo existente de visitantes extranjeros para ofrecer productos artesanales o servicios de alimentación, hospedaje o entretenimiento.   Generalmente se establece en la figura de turismo comunitario un esquema de colaboración conjunta entre varios miembros de la comunidad, para comercializar productos o servicios turísticos a través de un canal común de comercialización, y una distribución de las utilidades entre los miembros participantes, o su reinversión en programas comunitarios.  Sin embargo, también existen emprendedores por cuenta propia, especialmente en el sector artesanal, quienes ofrecen sus productos o servicios individualmente a los consumidores.

3.  Comunidades como proveedores de productos o servicios a intermediarios. La intermediación es un factor importante a ser tomado en el sector del turismo.  Los consumidores finales, regularmente requieren de uno o varios intermediarios para la planificación de sus viajes y la ejecución de los mismos.  La intermediación turística está representada por agencias de viaje, operadores de viaje internacionales, navieras de cruceros, operadores de viaje locales, y en casos más particulares, guías de turismo, hoteles y restaurantes, quienes recomiendan o venden servicios de terceros a los turistas.  Tomando esto en cuenta, ciertas comunidades han identificado como su principal cliente al sector de intermediación turística.  Tal es el caso de la Asociación Q’eqchi, Ak’ Tenamit, que opera un centro de artesanías y provee servicios de restaurante a orillas del Río Dulce, en la aldea Barra Lámpara, Livingston, Izabal.  En este caso, el área de la Costa Atlántica y del Río Dulce tiene una alta visitación de turistas que ingresan al país a través de cruceros.  Este tipo de turismo está manejado por las empresas navieras que funcionan como un operador de turismo internacional que vende paquetes especializados a sus pasajeros en cada puerto de desembarque.   Tomando esto en consideración, la negociación de los servicios y productos turísticos se realiza entre la empresa naviera y los actores locales (operadores de turismo locales y otros grupos organizados).  La asociación Ak’ Tenamit ofrece sus instalaciones a orillas del Río Dulce como un centro comunitario que brinda productos artesanales étnicos con un valor agregado basado en comercio justo (los ingresos obtenidos por actividades turísticas son usados para proyectos de educación y salud).  Este destino no es ofrecido a los consumidores finales, sino a los intermediarios, debido al alta influencia que tienen éstos sobre el poder de compra de aquellos.

4.  Comunidades como empleados de empresas turísticas.  Existen casos donde las empresas turísticas han sido factores importantes para el desarrollo turístico de ciertas localidades.  En estos casos, las empresas son fuente de empleo para miembros de la comunidad.  También se da el caso de alianzas entre los representantes del poder local y estas empresas para que éstas contribuyan en el desarrollo local a través de labor social, educativa o ambiental.  En el caso del poblado de San Andrés en el departamento de Petén, el desarrollo turístico estuvo influenciado en gran medida por la existencia del Hotel Ecológico Ni’Tun, el cual, además de tener una relación cordial con la comunidad, ha apoyado en los esfuerzos municipales para el desarrollo local.  El éxito de esta empresa, ha incentivado la inversión en el municipio y la participación de más miembros comunitarios en iniciativas turísticas.

Además de las categorías anteriores, podría teorizarse otras, que, aunque no existan ejemplos documentados, podrían existir (actualmente o en el futuro):

5.  Comunidades como intermediarios de productos o servicios turísticos

6.  Comunidades como empleadoras de mano de obra no – comunitaria

7.  Comunidades como consumidores de productos o servicios turísticos

La inexistencia de bibliografía o iniciativas que aborden estas últimas tres categorías puede deberse a los enfoques que tradicionalmente se asumen respecto al papel que tienen o deberían asumir las comunidades en el sector turismo.

Las certificaciones turísticas y las comunidades

En el sector del turismo, el interés creciente por la sostenibilidad ha generado una demanda de servicios que sean responsables, tanto en lo ambiental como en lo cultural.  Para asegurar estos requerimientos, diferentes instituciones han creado sistemas de certificación para garantizar un turismo “responsable” por parte de los oferentes.  El objetivo de este tipo de certificaciones es auditar a las empresas turísticas (operadores de turismo, hoteles, restaurantes y proyectos comunitarios), para que cumplan con estándares mínimos en cuanto a su sostenibilidad económica, ambiental y sociocultural.  Toda vez que las empresas inscritas en la certificación cumplan con la calificación requerida según estos criterios, se procede a otorgar un certificado o sello que puede ser usado para fines mercadológicos o de relaciones públicas.  Esto genera beneficios tanto para las empresas, como para las comunidades que se encuentran en su radio de acción. Según los criterios de sostenibilidad, se establece por norma la participación de miembros comunitarios dentro de la planilla de personal permanente, programas de fortalecimiento de la identidad, difusión cultural hacia los turistas, protección del patrimonio cultural, códigos de ética y conducta para los turistas en cuanto a su relación con la comunidad, y alianzas estratégicas con proveedores locales de insumos necesarios para las operaciones de las empresas (alimentos, mobiliario, decoración, servicios, etc.) entre otros.  Además, las certificaciones no sólo califican empresas lucrativas, también pueden auditar y certificar proyectos de naturaleza comunitaria.
En el caso guatemalteco, la certificación que ha cumplido con estos criterios, ha sido la denominada “Green Deal” administrada por la ONG “Alianza Verde” quien estuvo a su cargo hasta el año 2009, apoyada por la organización Rainforest Alliance y la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (FUNDESA). 

Conclusión:

El fenómeno de las comunidades como proveedores de servicios o productos de naturaleza turística no es algo nuevo en Guatemala.  Tiene sus raíces desde la década de 1980.  Sin embargo, la conceptualización de la modalidad de “Turismo Comunitario” tal y como lo ha establecido la OIT, se origina más recientemente, en la década de 2000.


La dinámica de los diferentes actores del sector turismo en Guatemala ha sido bastante diversa en cuanto a las políticas oficiales, las iniciativas particulares y la cooperación internacional, a lo largo de los últimos veinticinco años.  Cada uno de los enfoques abordados ha considerado a las comunidades desde perspectivas diferentes.  Sin embargo, en los últimos cinco años, la modalidad de turismo comunitario ha tomado un interés particular en las diferentes agendas de desarrollo turístico en Guatemala.


El turismo comunitario se enmarca dentro de la modalidad de turismo sostenible, y se complementa con otras modalidades tales como el ecoturismo y el turismo cultural.


A pesar de la trayectoria existente sobre turismo en áreas rurales y microempresas turísticas, la bibliografía a disposición no analiza la efectividad de las iniciativas emprendidas a lo largo del tiempo.  Esta carencia de información limita la interpretación del fenómeno a su evolución histórica y a las intenciones por parte de quienes iniciaron los procesos.  Sin embargo, podría ser de mucha más utilidad establecer los patrones de éxito y fracaso basándose en los objetivos fijados para cada proyecto.

Se establece aquí un primer acercamiento académico del fenómeno del turismo y las comunidades como base para el establecimiento de futuras líneas de investigación.

Bibliografía:

Alarcón, P. (2000) Formulación de un plan estratégico para una empresa de servicios turísticos de hospedaje en los municipios de Nebaj, San Juan Cotzal y Chajul, departamento de Quiché. Guatemala: http://www.scribd.com/doc/19432060/Plan-Estrategico-para-Hospedajes-en-Nebaj-Chajul-y-Cotzal-Quiche-Guatemala

ACNUR.  (1991)  Carta de entendimiento entre el gobierno de Guatemala y la oficina de la alta comisionada de las Naciones Unidas para los refugiados relativo a la repatriación voluntaria de los refugiados guatemaltecos.  Guatemala : http://www.acnur.org/biblioteca/pdf/1431.pdf

Asociación Ak’Tenamit, AGRETUCHI, FENATUCGUA. (2006) Propuesta: Implementación de una Escuela en la región de las Verapaces, replicando el modelo existente en Izabal, Guatemala. Guatemala. Obtenido el 18 de Enero de 2010: http://www.scribd.com/doc/6871071/Propuesta-STEP-Escuela-Turismo-Comunitario-Sustentable-Verapaces-Guatemala

Banco de Guatemala (2009)  Estadísticas económicas: Años 2008-2010.  Guatemala.  Obtenido el 18 de Enero de 2010: http://www.banguat.gob.gt/inc/main.asp?id=33190&aud=1&lang=1

Cámara de Turismo de Guatemala. (2003) Política Nacional para el Desarrollo Sostenible de Guatemala 2004-2014.  Guatemala.

CASABAL. (2006) Informe Final: Consultoría de desarrollo del turismo en Sololá. Guatemala. Obtenido el 14 de Enero de 2010: http://www.scribd.com/doc/7389183/Desarrollo-Del-Turismo-en-Solola-SOCODEVI-CECI

Cooperativa Carmelita, San Andrés Petén. (2009) Plan de desarrollo comunitario de Carmelita. Proyecto de Fortalecimiento a la Diversificación Económica y Gestión Local de las Organizaciones Comunitarias de Petén – Proyecto DEGL. Obtenido el 14 de Enero de 2010: http://www.scribd.com/doc/16733348/PDC-CARMELITA

Del Valle, D. (2002) Certificaciones Turísticas en Centroamérica: Actualización de Estudios.  Rainforest Alliance - PROARCA.  Guatemala: http://www.rainforest-alliance.org/tourism/documents/study_results.pdf

Gobierno de Guatemala – URNG – ONU  (1996)  Acuerdo Sobre el Cronograma para la Implementación y Verificación de los Acuerdos de Paz.  Guatemala : http://www.congreso.gob.gt/Docs/PAZ/ACUERDO%20SOBRE%20EL%20CRONOGRAMA%20PARA%20LA%20IMPLEMENTACI%C3%93N.pdf

Gobierno de Guatemala (2000) Estrategia Nacional de Turismo.  Guatemala.

Obando, J. (2008) Características de las microempresas y sus necesidades de formación en Centroamérica y República Dominicana. Coordinación Educativa y Cultural Centroamericana (CECC). San José, Costa Rica: http://portal.oit.or.cr//dmdocuments/oml/observa_form.pdf

Piedra, S.  (1998)  Análisis sobre la microempresa turística en Guatemala.  Programa de apoyo al sector informal en Guatemala (PROSIGUA).  Guatemala: http://www.infomipyme.com/Docs/GT/Offline/infmitur.htm

Pilón, M. (2007) Las áreas protegidas. Prensa Libre, 24 febrero 2007. Obtenido el 18 de Enero de 2010: http://www.prensalibre.com.gt/pl/2007/febrero/24/164243.html

Prismack, R., D. Bray, H. Galletti, I. Ponciano. (1998) Timber, Tourists, and Temples: Conservation and Development in the Maya Forest of Belize, Guatemala, and Mexico.  Island Press. Washington, DC.

Red de Turismo Sostenible de Latinoamérica REDTURS – OIT. (2003) Declaración de San José sobre turismo rural comunitario.  San José, Costa Rica: http://www.redturs.org/inicio/docu/DeclaracionSan-Jose-Espa.pdf

Rodas, I. (2001) Las rutas del norte, la migración por el Usumacinta, Guatemala. En: Amérique Latine Histoire et Mémoire. Les Cahiers ALHIM, 2 [En línea], Puesto en línea el 16 junio de 2006: http://alhim.revues.org/index593.html. consultado el 15 de enero de 2010.

Romero, W. (2006) Cadenas de Valor: Una aproximación conceptual y metodológica para su estudio. Reflexiones Económicas.  Instituto de Investigaciones Económico Sociales IDIES-URL.  Guatemala.

Segura, G., C. Inman. (1998) Turismo en Guatemala: El reto de la competitividad. Centro Latinoamericano de Competitividad y Desarrollo Sostenible, INCAE. Obtenido el 14 de Enero de 2010: http://www.incae.com/ES/clacds/nuestras-investigaciones/pdf/cen610filcorr.pdf

Sociedad Civil Organización, Manejo y Conservación OMYC, Uaxactún, Flores, Petén.    (2008) Plan de desarrollo comunitario de Uaxactún. Proyecto de Fortalecimiento a la Diversificación Económica y Gestión Local de las Organizaciones Comunitarias de Petén – Proyecto DEGL.  Obtenido el 14 de Enero de 2010: http://www.scribd.com/doc/16733053/PDC-OMYC-UAXACTUN

USAID – Counterpart International. (2006) Alianza para el Turismo Comunitario: Plan de Trabajo para el Año 2007.  Obtenido el 14 de Enero de 2010: http://www.scribd.com/doc/6871084/Plan-de-trabajo-Alianza-para-el-Turismo-Comunitario-AF-07-dic

(2006) Boletín Internacional de Desarrollo Local Sostenible: Boletín de Información #28 Obtenido el 14 de Enero de 2010: http://desarrollo-local.blogspot.com/2006_04_01_archive.html


[1] Licenciado en Ecoturismo, investigador del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (IDIES) de la URL.  Educador y formador turístico.  Ha sido consultor para el desarrollo turístico en Guatemala y Centroamérica.

Comentarios

  1. Muy bueno tu post/artículo Pablo! Me interesó particularmente el énfasis que le das al turismo sostenible, es algo que estudiamos bastante en mi Universidad en Curitiba, Brasil y que normalmente es dejado de lado por la necesidad imperante de comercialización.

    Me parece que sería interesante que aportaras tus ideas en una red social para el intercambio de información entre profesionales interesados en la cooperación internacional y el desarrollo sostenible en América, yo soy licenciada en gestión del turismo y otros profesionales también participan con estos intereses.

    El Sistema de Información Conectamerica es una iniciativa promovida por un grupo de ciudadanos interesados en la cooperación internacional, que comparten experiencias y recursos en sus diferentes profesiones y países, y promueven un desarrollo humano sostenible.

    El objetivo es ofrecer un salón virtual y varios canales para que los individuos, las organizaciones y las empresas puedan comunicarse y colaborar entre sí, sin intermediarios ni fronteras.

    Sigue el enlace: http://conectamerica.ning.com

    ¡Nos vemos en la red!

    Un saludo

    Irene
    Conectamerica Community Manager"

    ResponderBorrar
  2. Muy buen artículo... Sin duda, el turismo en Guatemala forma gran parte de la economia de nuestro pais. Guatemala cuenta con muchas ciudades turisticas, que han sido acreditas, como las mejores ciudades para turistas, una de ellas es la Antigua Guatemala, la cual fue nombrada como la mejor ciudad destino turistica por una revista inglesa en el 2009

    ResponderBorrar
  3. Interesante la posición del turismo en Guatemala y el enfoque económico respecto de la oferta y demanda...

    Gracias!

    ResponderBorrar
  4. Un saludo desde Quetzaltenango Guatemala, actualmente se debe de aportar a la sostenibilidad de los recursos naturales, en general de américa, ya que no se toma en cuenta lo que es el ecoturismo que es mas amigable con el medio ambiente, la participación e involucreción de los comunitarios es fundamental, esto ayuda a forjar la identodad de cada poblado y poder sentirse parte de algo por lo que deden de proteger los recursos que posean, actualmente estoy investigando areas con potencial ecoturistico en el municipio de Santa María Chiquimula, para posteriormente crear propuestas para fomentar rutas ecoturisticas en el municipio

    ResponderBorrar
  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderBorrar
  6. Me has ayudado en mi plan de marketing, gracias chico!

    ResponderBorrar
  7. buena informacion estoy buscando conocer los sitios mas atractivos para hacer turismo en Norteamérica si es posible con los gastos al minimo asi que agradesco este articulo

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Las carreras técnicas y universitarias en turismo, en las regiones central y occidental de Guatemala

La Asistencia Técnica en Turismo para MYPEs